Quizá hayas visto algo parecido a esta planta en un planeta de alguna película de ciencia ficción, pero en la realidad, crece en la Puna de los Andes de Perú, Bolivia, Chile, y el oeste de Argentina.
La llareta o yareta (Azorella compacta) es una planta herbácea muy compacta y resinosa con disposición en cojín (algo así como una coliflor); se encuentra en la división espermatófita (produce semillas) y pertenece a la familia Apiaceae, lo cual la convierte en pariente del apio y el perejil. Además, en la parte reproductiva sus flores son hermafroditas (tienen órganos masculinos y femeninos), así que mediante la acción de insectos se puede auto-polinizar. Se caracteriza por ser una especie longeva y de lento crecimiento, aumentando su tamaño a una tasa promedio de un centímetro por año.

Se puede apreciar el diminuto tamaño de las flores de llareta al lado de una chinita (Coccidophilus sp.), un gorgojo (Cylydrorhinus sp.) y una moneda chilena que tiene un diámetro de 27 milímetros.
Es bastante sólida cuando ya tiene un volumen considerable, esto se debe a que cuando mueren las flores que se encuentran al final de cada tallito, estas forman una especie de relleno (detritus) dentro del cuerpo del cojín. Dicha solidez la pueden notar en la siguiente imagen que fue tomada en el año 2011, cerca de San Pedro de Atacama en la Región de Antofagasta, Chile. A la derecha aparezco yo, al medio está mi madre, que entre sus actividades como asesora ambiental de una minera promueve la protección de la fauna y la flora (como la llareta); y a la izquierda, mi hermano, quien se mantiene de pie sobre la llareta sin ningún problema.
La llareta es altamente resistente al estrés abiótico; por ejemplo, su disposición en cojín le permite modificar las características físicas de su ambiente, reduciendo la velocidad del viento y controlar las diferencias de temperatura. Crece en una altura de 3 a 5 mil metros sobre el nivel del mar, en suelos nutricionalmente pobres y de cualquier medida de pH, así como tiene la capacidad de subsistir en condiciones de sequía, alta temperatura y radiación solar.
La poca investigación que se ha llevado a cabo, más allá de su caracterización botánica, apunta a diterpenos que se han aislado desde esta planta, los cuales tendrían potenciales propiedades analgésicas, espermicidas, antivirales, gastroprotectivas, antiparasitarias, antiinflamatorias, antituberculosas, acción tripanocida contra el mal de Chagas, anti-hiperglicémica (útil en la diabetes), entre otras.
En la siguiente imagen, a la izquierda, se ve un gráfico donde se analiza el nivel de glucosa en la sangre de ratas a las cuales inicialmente se les indujo diabetes tras una inyección de streptozotocina. Posteriormente se comparó el efecto de dos diterpenos de la llareta (1 y 2) con clorpropamida, un fármaco usado para el tratamiento de la diabetes ya que estimula la secreción de insulina en el páncreas. Los resultados obtenidos mostraron que los dos diterpenoides aislados del extracto de la llareta tienen un efecto antidiabético prácticamente idéntico al del fármaco usado como control positivo [Fuentes, 2005]. Esta podría ser una explicación probable del efecto de la infusión de extracto de llareta (imagen de la derecha) utilizado como medicina popular en el altiplano.
Personalmente creo que la llareta también presenta un gran potencial para su uso en el ámbito biotecnológico y agrícola. Debido a su alta resistencia a condiciones de sequía, calor y suelos deficientes, es un organismo ideal para usar como modelo de estudio genómico que permita encontrar genes útiles para traspasar mediante ingeniería genética a cultivos alimentarios. Existe tal vez la posibilidad de que esta planta pueda aportar a la producción de cultivos más resistentes a los problemas que el cambio climático ha ido empeorando durante este siglo XXI, como lo son la falta de agua, pérdida de suelos cultivables y temperaturas extremas.
Si revisamos un poco los datos del pasado, uno de los primeros reportes históricos de esta planta herbácea fue llevado a cabo en 1586 por el español Pedro de Mercado Peñaloza en Relaciones Geográficas de Indias, sin embargo, una de las primeras descripciones detalladas (y acompañada de una colección fragmentaria de la planta) pareciera ser la del Capitán Joseph Andrews en 1827. La siguiente persona en proporcionar un ejemplar de llareta fue el botánico y coleccionista chileno, Federico Philippi, quien lo obtuvo durante sus viajes a la frontera Chile-Bolivia en 1885. Esta sería descrita seis años después como Azorella compacta por su padre, el naturalista Rodolfo Armando Philippi.
Por el alto contenido energético de sus resinas este arbusto se usó como combustible durante miles de años por los pueblos altiplánicos, y hasta la actualidad las comunidades la extraen para diversos usos, como leña, obtención de resinas, o como medicina popular para el resfrío, dolores musculares, hiperglicemia, úlceras, “mal de montaña” o en vendajes de heridas.
Lamentablemente por más de medio siglo sufrió una extracción destructiva en Chile y Perú por los empresarios de los ferrocarriles sumado a la actividad minera y salitrera, quienes la depredaron como combustible, lo cual provocó su desaparición en varias localidades. A mediados del siglo XX su uso se reguló, y por suerte aún quedan ejemplares dispersos. Hay algunos de hasta 3 mil años de antiguedad como el que incluyó la fotógrafa Raquel Sussman en su inventario de los organismos vegetales más longevos del mundo.
Rachel Sussman: The world’s oldest living things [Véase video subtitulado en TED]
Referencias:
- Ficha de Antecedentes de Especie: Azorella compacta. Ministerio del Medio Ambiente, Chile.
- E. Wickens. (1995). Llareta (Azorella Compacta, Umbelliferae): A review. Economic Botany. Volume 49 (2), pp 207-212
- Neira et al. (1998). Activity of diterpenoids isolated from Azorella compacta (Llareta) on Trypanosoma cruzi amastigotes. Boletín Chileno de Parasitología, 53:9–13
- Orlando Muñoz, Marco Montes, Tatiana Wilkomirsky. (1999). Plantas medicinales de uso en Chile: Química y Farmacología. Santiago de Chile: Editorial Universitaria,
- Neira et al. (1998). Activity of Dipernoids isolated from Azorella compacta (Llareta) on Trypanosoma cruzi amastigotes. Boletín Chileno de Parasitología. 53 (1-2): pp 9-13
- Loyola et al. (2001) Diterpenoids from Azorella yareta and their trichomonicidal activities. Phytochemistry 56:177–180
- Morales et al. (2003). Effect of azorellanone, a diterpene from Azorella yaretaHauman on human sperm physiology. Journal of Andrology, 24:364–370
- Loyola et al. (2004). Mulinane-type diterpenoids from Azorella compacta display antiplasmodial activity. Phytochemistry 65:1931–1935
- Fuentes et al. (2005). Experimental antihyperglycemic effect of diterpenoids of llareta Azorella compacta (Umbelliferae) Phil in rats. Phytotherapy Research. 19 (8): pp 713-716
- Kleier, P. Rundel. (2009). Energy balance and temperature relations of Azorella compacta, a high-elevation cushion plant of the central Andes. Plant Biology. 11(3): pp 351-358
- Areche et al. (2013). Further mulinane diterpenoids from Azorella Compacta. Journal of Pharmacy and Pharmacology. 65 (8): pp 1231-1238
- Salgado et al. (2014). A new mulinane diterpenoid from the cushion shrub Azorella compacta growing in Perú. Pharmacognosy Magazine, 10:S543–S548
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